lunes, 14 de noviembre de 2011

brillo en los ojos

Hoy lo cotidiano dejó de serlo de nuevo. Me siento vivo como hace muchos años no lo sentía, y a pesar de que sigo trabajando con mis complejos de carencia, se que mi verdadero proceso comenzó hoy y elijo ser tan íntegro hoy como todos los segundo que me quede de vida. Juro hacerme amigo de mi nerd y convivir con él, y amarlo tanto como lo amo hoy. Me doy mi palabra que seré, y el mecanismo para hacer no me volverá a importar nunca más, pero sobre todas las cosas, me doy mi palabra de ser la diferencia en mi mundo en todos los sentidos, muero por estar económicamente estable y que deje de ser un punto en mi vida. En realidad, ya no debo sanar con nadie, simplemente estar dispuesto a todo como lo estuve el sábado pasado. Merezco de corazón ser yo, sin pesos muertos, sin historias que contar y sin miedo a volver, porque tengo una brújula en mi corazón, quien sabe guiarme cada que me encuentro perdido. Prometo conservar el brillo en mis ojos, que contagia al mundo. Me amo!

Mi punto el día de hoy es sentirme inseguro respecto al dinero, porque en mi casa hay un estado de carencia impresionante, sin embargo, ya no tengo puntos que sanar con absolutamente nadie, sino de nuevo solo se trata de entender el poder que hay en mí para cambiar las cosas. El mecanismo ni siquiera es importante. Hoy elijo hacer mi carta compromiso de nuevo y ser tajante cumpliéndola, además de diario hacer algo nuevo a partir del día de hoy. Hoy será ir a una clase de danza acrobática. Llevaré una agenda de cosas hermosas por cumplir, y me pondré metas diarias

Me amo

lunes, 17 de octubre de 2011

El poder de dar...la importancia de ser

Leyendo el título que decidí darle a mi diario, después de muchos años de no haber escrito una sola palabra dentro de él, me remonté al momento en mi vida en que lo titulé "el diario de lo cotidiano". La vida era magia en su expresión más pura, magia que sentía y vivía en cada célula de mi cuerpo. Respiraba magia, despertaba magia y era obvio que todo iba a ser mágico. Lo más especial de la vida se encuentra en los lugares que la gente considera como cotidianos o rutinarios, el punto especial es ser lo suficientemente responsable para poderlos ver. Este día, mi vida volvió a tener magia en su cotidianidad, a un nivel que no lograba varios años atrás.
Llegué a la universidad donde estudio, con toda la intención consciente de conseguir a la persona que quiera acompañarme en el camino que estoy tomando, y en realidad ya estaba prácticamente segura. El cansancio se me notaba en el rostro, pero aún así elegí ser responsable. Entré al salón donde esperaba mi maestra de filosofía, a quien considero uno de los maestros de mi vida, y por primera vez hace mucho tiempo, escuché la verdadera voz de muchas personas, que por miedo al rechazo, había decidido considerar ruido en mi corazón. Mi enrolada asiste a la misma clase que yo, y di el primer paso hacia ella, convencido al 100% de que ya había logrado convencerla y que iba a estar en completa libertad para el viernes, sin embargo me topé con la respuesta habitual en mi vida, no. Me contó una historia que hasta pude haber considerado fantástica en el pasado, pero esta vez elegí mirar mas allá de sus palabras y amar profundamente su miedo a enfrentarse. El coraje comenzó a subir lentamente por mi torrente sanguíneo, pero elegí calmarlo, porque por primera vez, entiendo la enorme capacidad de elección que tengo. ¿Elegí que una serie de accidentes sucedieran para que mi enrolada no pagara? La respuesta es absolutamente sí, no tengo idea de como explicarlo con lógica, pero, he decidido hacerla a un lado y empezar a vivir una vida en completa responsabilidad. Sin enrolada, llegué a mi casa, como siempre a buscar la forma de venderme mi fracaso para percibirlo como normal, hasta que hablé con mi hermano, quien me dio una de las respuestas más hermosas que he escuchado desde hace muchísimo tiempo. Le conté que no tenía enrolado, y me dijo, la próxima vez que hables con alguien, date cuenta de cuanto lo amas y quieres verlo cambiar, no para tu bien, sino para el suyo, si buscas su bien te estás saboteando de nuevo. Sus palabras me dolieron, pero fueron sanadoras a la vez. A partir de ese momento, mi vida tomó un giro completamente diferente. Un taxista eligió ser mi enrolado sin decirle una sola palabra, una señora me regaló una dona en medio de la calle, hice algo para recuperar mi auto sin tener dinero para pagarlo, y mi mundo comenzó a cambiar 360 grados. Una enrolada que estaba segura me dejó plantado, pero no me voy a rendir porque soy poderoso, valiente y amoroso. Me amo y en mi exterior comienza a notarse cada vez más como cambio por dentro. Mi compromiso mañana es escribir con mucha más estética que hoy:)

domingo, 16 de octubre de 2011

Hoy salí al mundo de nuevo

Hoy salí al mundo de nuevo, y por un momento temblé de miedo al darme cuenta que podría resultar caer de nuevo en lo mismo de toda la vida. Un hombre que no ha dejado su infancia y que no cree que merece lo que tiene, que sabotea sus logros y que está cómodo y sobreprotegido. Salí por la puerta que por un fin de semana arropó mis sueños, mis metas y el enorme crecimiento que tuve, y cuando miré atrás me di cuenta porque estaba en realidad aterrado. Mis piernas temblaban no por lo que pensaba que iba a enfrentar, sino por lo que se que dejé atrás, justo en ese salón, en sus sillas, sus paredes y su piso alfombrado. Dejé atrás todos mis pretextos de decir que no puedo lograr mis sueños, porque logré cosas que en mi vida había pensado que iba a poder lograr. Dejé atrás mi miedo al rechazo, porque se por primera vez en mi vida que no hay forma alguna de cambiar lo que soy, y que la parte que no me gusta es tan mía como la parte que amo de mí, y comencé a amarme de verdad, sin miedo a ser lo que no soy, porque eso es imposible. Dejé atrás mi miedo al éxito porque recobré el poder que tengo, y me di cuenta por completo del hombre tan poderoso que siempre he sido, y que así me percibe el mundo. Dejé atrás mi impetuosa necesidad de buscar llamar la atención, porque por fin entendí que no era yo quien la buscaba, sino un niño de 7 años lastimado porque no lo aceptaban como era. Dejé atrás toda posibilidad existente de no lograr mis sueños, y esto último es probablemente la carga que me ha costado más trabajo dejar atrás, porque no existe forma en que pueda volver a justificar un acto o acontecimiento en mi vida, sin estar 100% conciente de que yo lo generé, y eso significaría regresar al salon, abrirlo y tomar de nuevo todas las cargas de las que me he liberado.

Así es, dejé atrás muchas cosas, pero a su vez cargo con otras más, que lejos de estar incrustadas en mi cuerpo causando heridas, aligeran al mismo, dejándolo tan ligero como el mismo viento. Me llevé un contrato que dice que soy un hombre poderoso, valiente y amoroso, un contrato que deja de manera muy clara quien soy yo a partir de éste momento (o quien siempre fui y no quise aceptar) Llevo conmigo también la seguridad de que puedo superar mis miedos, no creyendo que nunca más los voy a sentir, sino siendo responsable con mi sentimiento y pasando por ellos, creando más poder a mi vida. Pude haber dejado muchas cosas que por años justificaban mi paso por la vida, pero me llevo la única cosa que realmente vale la pena al menos en mi vida. Me llevo a mí mismo entre mis brazos como un ganador, un hombre que va a ir por sus sueños de forma incondicional, y que elige de manera responsable en su vida. Por fin entendí que la felicidad real no se encuentra en el estado de euforia latente, sino en un estado de paz y centro.
Es hora de crecer, pequeño niño de 8 años enojado. Ya no tienes pretextos para generar en tu vida lo que sabes que no quieres

Te amo muchísimo, y estoy orgulloso de tí
Soy un hombre poderoso, valiente y amoroso!